Aquellos Maravillosos Años... contigo

Nosotros hemos visto Espinete, Barrio Sésamo, Campeones, Bola del Drac, y series de dibujos similares. Andábamos en monopatín, hacíamos graffitis, pintábamos las agendas como si fuese lo único por lo que íbamos al instituto. Soñábamos, nos reíamos en cada descanso como nunca, a carcajada limpia, con lagrimilla en los ojos. Vimos cómo nuestras salidas se tematizaban, pasando de Ruta 66, a La Cama y sitios similares, siempre con algún día que otro dedicado sólo al tequila. Tuvimos muchas historias de amor, deseo, amor-odio, pero ninguna quebrantó nunca nuestra amistad. Vimos ganar a la Francia de Zidane en el Mundial del 98, casi la misma que nos eliminó en Cuartos en la Euro'00. Sufrimos con el robo que nos hicieron en el Mundial de Corea y Japón en 2002 tirados en la playa, con una borrachera típica de hogueras y con un sol de justicia machacando nuestras caras resacosas. Compartimos experiencias con la naturaleza, con nuestro querido Mediterráneo, con la Serra Grossa, Cantabria, Mallorca,.... Y siempre supimos compartir inquietudes, hobbies: baseball, volley, guitarra, hip-hop, patines, graffitis, borracheras,.... Fuimos un grupo unido que se denominó Kalaos pero que nació casi como Bragas.

Nos reímos con y de nosotros, disfrutábamos de todos los momentos, andábamos a la Santa Faz aunque lloviese a cántaros, escuchamos juntos canciones como Soy de Aragón, Soy un Gángster del Amor, Ballantines, Don Simon y raps por el estilo. Nos definimos como personas, supimos superar los cambios, nos quisimos siempre, nos apoyamos siempre, discutimos muchas veces como sólo hace la gente que se quiere, empezamos pocos y fuimos abriendo nuestro corazón a todos los que querían estar con nosotros, personalizamos una parte de nuestro instituto. Y, además, estoy segura de que fuimos una generación que marcó una época. Nos graduamos juntos y nos comimos la cabeza con nuestro futuro. Fuimos nosotros, somos nosotros. Ese grupo de gente que nunca se separará, que se querrá por los años que nos quedan, que aprendió junto, unido, apoyándose siempre, que lo mejor de esta vida es ser uno mismo, sin tapujos. Que aprendió que para lo bueno y para lo malo siempre estaríamos ahí. Aprendimos muchas cosas juntos, pero nunca nos enseñaron que tendríamos que sobrevivir a la pérdida de uno de nosotros.... Y eso, simplemente, nos deja descolocados en un lugar de la tristeza, perdidos en la desesperación de saber que ya no está un ser querido... Desorientados, sin rumbo, hundidos.

En este momento vienen a mí esos recuerdos que nunca se borrarán de mi mente, esos detalles que sólo los buenos amigos pueden tener, esas palabras de apoyo, esos abrazos que ya nunca nos volveremos a dar, estos años en los que perdimos el contacto a persar de querernos tanto... Esas bromas, esas frases, esa cabeza de genio que siempre tenía una palabra de apoyo, sabiduría que sólo un ser genuino y único puede tener, ... recuerdos que me llenan de alegría por haberme sabido tu amiga y de tristeza por saber que nunca más te volveré a tener cerca para darte un abrazo y decirte que TE QUIERO, QUE TE QUIERO MUCHO y que nunca, nunca, nunca, nunca voy a olvidarte. Ni yo, ni por supuesto nadie que hubiese tenido un mínimo contacto contigo. Las personas como tú perduran, están siempre en el corazón de la gente....

Blake, no sé cómo vamos a salir de este agujero negro sin tus palabras de apoyo, sin tu sonrisa permanente, sin tus salidas habituales. No sabes el duro camino que nos queda sin tí. No te imaginas lo mucho que te echaremos de menos... Y todavía me pregunto, y me preguntaré siempre, por qué la tierra que tanto amabas nos dejó sin nuestro querido amigo....

Y....la vida siguió, como siguen las cosas que no tienen mucho sentido....
Te quiero Miguel